Blefaroplastia

La blefaroplastia -o cirugía de los párpados caídos- es una operación breve, con un postoperatorio sencillo y unos resultados permanentes en el tiempo. La técnica quirúrgica consiste en corregir el exceso de piel y las bolsas de grasa de los párpados superiores e inferiores. 

¿Qué es la blefaroplastia?

La blefaroplastia es un procedimiento que se realiza para reducir el exceso de piel en el contorno de los ojos y rejuvenecer la mirada. Sin embargo, en función de las características del paciente, existen varias técnicas quirúrgicas que se pueden realizar para quitar la piel sobrante o flácida y las bolsas palpebrales.

Pese a que no hay una edad más adecuada para realizarse este tipo de operación, resulta una cirugía muy solicitada en hombres y mujeres a partir de los 45 años, aunque  tenemos pacientes jóvenes que por sus características anatómicas necesitan de esta intervención.

Blefaroplastia superior

Eliminar el exceso de piel de los párpados superiores, consiguiendo despejar la mirada para darnos un aspecto más rejuvenecido.

Blefaroplastia inferior

Corrige las bolsas grasas de los párpados inferiores, así como las arrugas y pliegues, mejorando la estética de los párpados.

Blefaroplastia completa

Cirugía que consiste en eliminar la grasa y piel sobrante de los párpados superiores e inferiores para devolver vitalidad a la mirada.

 

Blefaroplastia con resurfacing

Cuando además de lo anterior, es necesario tensar la piel flácida y mejorar la textura, haciendo que las líneas de expresión se vuelvan menos visibles.

Blefaroplastia láser con resurfacing

Para la resección de las bolsas palpebrales inferiores utilizamos la vía transconjuntival -sin corte de piel externo-. Esta técnica es única porque evitará un cambio en la forma de los ojos y una cicatriz visible.

El resurfacing es una técnica que consiste en producir una vaporización de las células de la dermis mediante láser. Con esto conseguimos mejorar visiblemente la textura y la densidad de la piel, pues se vuelve más firme y tensa. 

Cuando realizamos una blefaroplastia asistida con láser, el corte de piel y resección de bolsas palpebrales son más precisas. De esta manera, reducimos el traumatismo que sufren los tejidos, facilitando la cicatrización, reduciendo el sangrado, la aparición de hematomas y acortando el tiempo de recuperación del paciente.

Asimismo, con la tecnología láser también podemos realizar resurfacing, que es una quemadura superficial que dará lugar a una mejoría significativa de la calidad de la piel y atenuará las líneas de expresión más finas.

Se realiza bajo anestesia local con o sin sedación

Inmediata

Es de 2-3 días

Permanentes

Preguntas frecuentes de nuestros clientes

Estas son las preguntas más frecuentes de nuestros pacientes sobre la cirugía de párpados:

Durante la operación no se siente dolor. Sin embargo, puede aparecer al terminar la intervención y durar entre 1 o 2 días como máximo. No obstante, el dolor y la inflamación se atenúan con la toma de analgésicos, antiinflamatorios y la aplicación de gasas humedecidas con suero fisiológico.

El post operatorio dura entre 3 y 7 días, pero frecuentemente se puede hacer vida normal a partir del tercer día.

Asimismo, con la tecnología láser también podemos realizar resurfacing, que es una quemadura superficial que dará lugar a una mejoría significativa de la calidad de la piel y atenuará las líneas de expresión más finas.

 

Los puntos se quitan a los siete días de realizar la blefaroplastia.

Se realiza bajo anestesia local con o sin sedación

Sí, la piel que se retira con la blefaroplastia no vuelve a salir, pero con el proceso normal de envejecimiento la caída de las cejas dará lugar a una falsa percepción de piel excedente del párpado superior.

Es de 2-3 días

Permanentes

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