La rinoplastia ultrasónica
¿Cómo funciona esta técnica?
Durante la cirugía, se utiliza un instrumento ultrasónico para cortar y modelar la estructura nasal con mayor precisión, lo que puede reducir el trauma en los tejidos y mejorar la recuperación postoperatoria. La rinoplastia también puede ayudar a corregir problemas respiratorios relacionados con la estructura de la nariz, como la desviación del tabique nasal.
Este procedimiento es seguro y efectivo y proporciona resultados duraderos y satisfactorios, mejorando tanto la apariencia como la función respiratoria de la nariz.

En Stinger, reconocemos cómo tu nariz puede influir en tu armonía facial. La Rinoplastia Ultrasónica es una técnica avanzada que permite resultados precisos y naturales. Nuestro compromiso es brindarte una experiencia de calidad y resultados notables que realcen tu belleza única.
Nuestro equipo de cirujanos plásticos altamente capacitados colabora contigo para comprender tus deseos y expectativas. Desde la consulta inicial hasta la recuperación, te brindamos atención personalizada y orientación experta para asegurarnos de que estés informado y cómodo.
La Rinoplastia Ultrasónica utiliza tecnología innovadora para esculpir tu nariz de manera segura y eficiente. Nuestro compromiso es brindarte resultados que realcen tu expresión y confianza, a la vez que te ofrecemos una experiencia cuidadosa y segura.
Preguntas frecuentes de nuestros clientes
Aquí tienes algunas de las preguntas que se suelen hacer nuestros pacientes:
El resultado es una rinoplastia sin riesgo de lesiones en tejidos próximos y con menores probabilidades de que ocurran fracturas incontroladas. Uno de sus aspectos más destacables es que solo genera una cicatriz, el corte que se produce entre las dos fosas nasales, si bien en poco tiempo pasa a ser casi imperceptible para el ojo humano.
La diferencia entre esta intervención y las rinoplastias tradicionales es que el remodelado nasal y los cortes se acometen con el bisturí piezoeléctrico y no con cuchilla, cincel y martillo. De algún modo, el proceso tradicional es similar al que realiza un escultor cuando talla una figura. Lleva menos tiempo que la rinoplastia ultrasónica, pero implica un proceso posoperatorio más prolongado.
El posoperatorio en las cirugías nasales tradicionales obliga al empleo de taponamiento de la nariz durante dos o tres días, para evitar el sangrado. Esto dificulta temporalmente la respiración. En cambio, con las intervenciones ultrasónicas, no siempre hay que usar tapones, aunque en los primeros días se puede sentir congestión nasal.
Con este procedimiento se producen menos hematomas alrededor de los ojos y un grado de hinchazón más bajo. Esta fase dura aproximadamente unos tres días. A partir de ahí, la cara comienza a recuperar su aspecto natural.
En cualquier caso, el paciente debe permanecer esos primeros días en reposo relativo en casa. Puede salir a pasear y hacer vida prácticamente normal sin entrar en grandes excesos.
En este tiempo son obligatorios los lavados diarios con suero fisiológico y la limpieza de la herida. Para el dolor se prescribe medicación domiciliaria, principalmente analgésicos, durante la primera semana.
Además, los primeros días conviene dormir con la cabeza elevada sobre el resto del cuerpo y es preferible no usar gafas durante las cuatro semanas siguientes a la intervención.
La férula que se coloca tras la intervención hay que mantenerla al menos una semana o diez días. Tras su retirada, ya se puede volver a la vida normal evitando grandes esfuerzos.
Más precisión, menos trauma, recuperación rápida y resultados estables y naturales. Esas son las ventajas que ofrece la rinoplastia ultrasónica.
Una vez se retira la férula, a la semana o diez días de la cirugía, el paciente ya puede ver los resultados obtenidos y realizar vida normal, pero la inflamación de las estructuras nasales puede mantenerse por más tiempo y hasta obtener el resultado estético final pasarán de tres a seis meses o un año, con cambios poco perceptibles.